¿Qué es el cáncer de riñón y cuáles son los mejores tratamientos?
Son preguntas que se hace una persona una vez que le han diagnosticado dicho cáncer.
De ahí que sea importante conocer los síntomas y factores de riesgo del cáncer de riñón.
Cáncer de riñón – Definición
El cáncer de riñón se refiere a un grupo de cánceres que comienzan en las células del riñón.
Al igual que otros órganos de nuestro cuerpo, los riñones son vulnerables a infecciones y enfermedades, incluido el cáncer.
Hay varios tipos de cáncer que pueden afectar al riñón, entre ellos:
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Carcinomas de células renales: Los carcinomas de células renales son, con mucho, la forma más común de cáncer de riñón y representan el 9 de cada 10 casos de cáncer de riñón.
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Carcinoma de células transicionales: Los carcinomas de células transicionales representan alrededor del 7% de los cánceres de riñón.
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Tumor de Wilms.
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Sarcoma renal.
Anatomía y función del riñón
Conocer un poco sobre la anatomía y la función del riñón puede ayudarte a localizar los síntomas, también a entender cómo el cáncer en esta área puede afectar tu cuerpo.
Los riñones están compuestos de dos órganos en forma de frijol, del tamaño de un puño pequeño.
Cada riñón se encuentra detrás de los órganos abdominales, a cada lado de la columna vertebral, respectivamente.
Algunas personas tienen solamente un riñón, como resultado de un defecto congénito o enfermedad.
Pueden vivir bien con sólo un riñón, siempre y cuando ese riñón sea funcional.
La función principal de los riñones es filtrar impurezas, eliminar el exceso de minerales y sal, así como el exceso de agua de la sangre.
Restos que son excretados en la orina.
Alrededor de 180 litros de sangre filtran nuestros riñones a diario, para producir aproximadamente de 1 a 2 cuartos de galón de orina.
La orina luego viaja por unos tubos, llamados ureteres, y se almacena en la vejiga hasta que es excretada (orinada).
Causas y factores de riesgo del cáncer de riñón
No podemos determinar exactamente qué causa el cáncer de riñón, pero los investigadores han identificado varios factores de riesgo para dicho cáncer.
Las causas y los factores de riesgo varían para cada tipo de cáncer de riñón, pero pueden incluir:
Antecedentes familiares de cáncer de riñón.
Condiciones genéticas
- síndrome de Von Hippel-Lindau (BVS)
- Carcinoma renal de células claras hereditaria no VHL
- Carcinoma de células renales papilares hereditarios (HPRCC)
- Síndrome de Birt-Hogg-Dubé (BHD)
- Leiomiomatosis hereditaria y cáncer de células renales (HLRCC)
- complejo de esclerosis tuberosa (TSC)
Factores varios
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Edad avanzada: El riesgo de cáncer de riñón aumenta con la edad, la mayoría de los carcinomas de células renales se producen a partir de los 40 años.
En contraste, el tumor de Wilms es más común en los niños.
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Ocupación: la exposición laboral a productos químicos y sustancias como el amianto, benceno, cadmio y aumenta el riesgo.
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Algunos medicamentos: Los diuréticos pueden causar un pequeño aumento en el riesgo de acuerdo con algunos estudios, pero esto puede deberse a otros factores, como la presión arterial alta.
O sea medicamentos utilizados para tratar la presión arterial.
La fenacetina se relaciono con el carcinoma de células renales, pero está fuera del mercado en los Estados Unidos desde hace varias décadas.
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Obesidad
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Presión sanguinea elevada.
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Tratamiento para insuficiencia renal con diálisis El tratamiento a largo plazo de la insuficiencia renal aumenta el riesgo de sufrir cáncer de riñon.
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Fumar: Las personas que fuman tienen un mayor riesgo de cáncer de riñón, aunque el riesgo disminuye después de dejar de fumar.
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Enfermedad de célula falciforme
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Género: El carcinoma de células renales es dos veces más común en hombres que en mujeres.
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Raza: Las personas con herencia africana, los indios americanos, y los nativos de Alaska tienen una leve incidencia mayor del carcinoma de célula renal.
Síntomas del cáncer de riñón
Lamentablemente, los síntomas por lo general no aparecen hasta que la enfermedad ha progresado.
De hecho, el cáncer de riñón se detecta generalmente por «accidente» al estar investigando otro síntoma o condición.
Los síntomas comunes del cáncer de riñón incluyen:
- Sangre en la orina, ya sea visto después de orinar o microscópicamente.
- Masa o bulto abdominal o lateral (flanco).
- Dolor pronunciado en la parte lateral o inferior de la espalda.
- Fiebre por infecciones desconocidas.
- Hipertensión.
- Pérdida de peso involuntario.
- Fatiga.
- En los hombres, un rápido desarrollo de un cúmulo de venas dilatadas, conocido como varicocele, alrededor de un testículo.
Diagnóstico del cáncer de riñón
Muchas veces una masa palpable o el hallazgo de una masa en un estudio radiográfico, como una radiografía, tomografía computarizada o resonancia magnética, durante una investigación para otra condición puede llevar a un médico a sospechar de cáncer de riñón.
Otras veces, la combinación de factores de riesgo más los síntomas sugieren que hay un cáncer de riñón.
Las pruebas que se pueden hacer para ayudar a diagnosticar la enfermedad incluyen:
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Examen físico
El médico podría realizar un meticuloso examen físico con especial y cuidadosa atención al examinar toda la zona abdominal
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Pruebas de orina
Se verifica la presencia de sangre y otros signos de enfermedad en la orina.
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Análisis de sangre
Se pueden practicar diferentes exámenes de sangre.
Por ejemplo, se ha reportado anemia en un 88% de los pacientes con cáncer de riñón avanzado.
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Tomografía computarizada (TAC)
Una máquina de rayos X conectada a una computadora toma una serie de imágenes detalladas de los riñones.
El paciente puede recibir una inyección de colorante, por lo que los riñones aparecen claramente en las imágenes.
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Prueba de ultrasonido
El dispositivo de ultrasonido utiliza ondas de sonido que los humanos no podemos oír.
Las ondas rebotan en los riñones, y una computadora detecta los ecos para crear una imagen llamada sonograma.
Un tumor sólido se puede resolver de un quiste mediante el uso de un sonograma.
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IRM (imágenes por resonancia magnética)
IRM utiliza una técnica especial para visualizar los tejidos blandos del cuerpo.
Es útil cuando el ultrasonido o el TAC no facilitan el diagnóstico y / o el contraste radiográfico no se puede administrar debido a una alergia o a insuficiencia renal.
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Biopsia
En algunos casos, el médico puede hacer una biopsia.
Una biopsia es la extracción de tejido para identificar células cancerosas.
El médico inserta una aguja fina a través de la piel en el riñón para recolectar una pequeña cantidad de tejido, por lo general usan ultrasonido o rayos X para guiar la aguja.Un patólogo usa un microscopio para buscar células cancerosas en el tejido de la biopsia.
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Cirugía
En la mayoría de los casos, basándose en los resultados de la ecografía y la tomografía computarizada, el médico tiene suficiente información para recomendar cirugía para extirpar parte o todo el riñón.
Un patólogo hace el diagnóstico final examinando el tejido removido bajo un microscopio.
Si se detecta el cáncer, es posible que se necesiten más pruebas para determinar si el cáncer de riñón se ha diseminado a tejidos u otros órganos cercanos.
Es lo que se conoce como metástasis.
El estadio del cáncer de riñón se diagnóstica midiendo el tamaño del tumor, la localización de las células cancerosas que pueden estar confinadas al riñón, diseminadas localmente o extendidas más allá del riñón (estadios I a IV).
Tratamiento del cáncer de riñón
El tratamiento para el cáncer de riñón por lo general incluye combinación de distintos procedimientos.
Cirugía
Casi todas las personas que padecen cáncer de riñón puede recibir algún tipo de cirugía para tratar el cáncer.
Los enfermos que están en la primera etapa cáncer de riñón son los mejores candidatos para la cirugía.
Por fortuna, el cáncer de riñón es uno de los pocos tumores sólidos en los que la cirugía puede ser beneficiosa incluso en casos avanzados cuando el tumor se ha diseminado a órganos distantes.
Vigilancia activa
Con intervención retardada si está indicada.
Técnicas de ablación
Como la ablación por radiofrecuencia o crioterapia son estrategias alternativas para determinados pacientes, especialmente ancianos y/o pacientes con otros riesgos de salud que no pueden soportar la cirugía.
Quimioterapia
Ha demostrado un efecto limitado contra el cáncer de células renales.
Radioterapia
La radioterapia se utiliza con mayor frecuencia para el tratamiento paliativo, para aliviar las molestias causadas por los efectos de la propagación del cáncer.
Inmunoterapia
También llamada terapia biológica, es una opción de tratamiento para el carcinoma renal avanzado, del tipo de células claras.
Medicamentos de inmunoterapia estimulan el sistema inmunológico para ayudar a combatir el cáncer.
Algunos de estos fármacos incluyen interferón y la interleucina-2.
Terapia focalizada
Varios medicamentos de terapia dirigida han sido aprobados para su uso en algunas personas con cáncer de riñón avanzado.
Estos fármacos bloquean y previenen el crecimiento y la diseminación de células malignas.
Atacan las células directamente o previnien el crecimiento de los vasos sanguíneos que alimentan el crecimiento de los tumores.
Los efectos secundarios de estos fármacos son diferentes de los de la quimioterapia y, en general, se toleran mejor que dicha terapia.
Medicamentos de terapia dirigida aprobados:
- Sunitinib (Sutent)
- Sorafenib (Nexavar)
- Bevacizumab (Avastin) en combinación con interferón
- Temsirolimus (Torisel)
- Everolimus (Afinitor)
- Axitinib (Inlyta)
- Pazopanib (Votrient)
- Erlotinib (Tarceva) sólo para el carcinoma de riñón, tipo de células no definidas.
Cuidados paliativos
En cualquier momento después del diagnóstico, un paciente con cáncer de riñón puede tener la opción de recibir tratamiento para controlar el dolor y otros síntomas, o para aliviar los efectos secundarios de la terapia.
Este tipo de tratamiento se llama cuidado paliativo.
Así mismo cualquier paciente puede querer explorar opciones para formar parte de ensayos clínicos, o sea, estudios de investigación de nuevos métodos de tratamiento.
Prevención del cáncer de riñón
Si bien no hay métodos probados para prevenir el cáncer de riñón, hay medidas que podemos tomar para reducir nuestro riesgo de padecer cáncer de riñón.
Dejar de fumar o No fumar nunca
El tabaquismo es un factor de riesgo para el carcinoma de células renales.
Tan pronto como dejas de fumar (nunca es demasiado tarde!), tu cuerpo cosecha los beneficios de mantenerse libre de tabaco.
Saber a lo que se expone en el trabajo
Si estás expuesto a humos, polvo y sustancias químicas/tóxicas en el trabajo, tienes derecho a saber a lo qué estás siendo expuesto.
El cadmio, algunos herbicidas y disolventes orgánicos como el tricloroetileno se han relacionado con un mayor riesgo de carcinoma de células renales.
Habla con el empleador sobre cómo limitar tu exposición.
Seguir una dieta bien balanceada
Mantener una dieta bien balanceada es ventajosa por muchas razones.
Una dieta rica en frutas y verduras, pero baja en grasas animales, es benéfica.
Además, la obesidad es un factor de riesgo para muchos tipos de cáncer de riñón.
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