También conocidos como leiomiomas o miomas uterinos, los fibromas uterinos son crecimientos anormales que se forman a partir de tejido muscular en el útero.
Es el tipo más común de tumor no canceroso en mujeres en edad fértil.
Los fibromas uterinos se estima que se producen en tres de cada cuatro mujeres durante su vida.
También tienden a disminuir en tamaño después de la menopausia.
De hecho, la mayoría de los miomas desaparecen después de la menopausia.
Hasta un 40% de mujeres en los EE.UU., de 35 años y mayores tienen fibromas uterinos, puesto que son muy comunes.
Para ser más precisos, cientos de miles de mujeres estadounidenses tienen que ser intervenidas quirúrgicamente mediante una histerectomía cada año debido a complicaciones causadas por fibromas.
No obstante tan sólo el 10% de las histerectomías son médicamente necesarias.
Una histerectomía es una cirugía mayor, que a veces requiere un mes o más tiempo de recuperación.
Además, una histerectomía completa induce la menopausia de forma prematura con síntomas como sofocos, aumento de peso, y bajón del estado de ánimo.
En muchos casos, se pueden explorar terapias naturales como alternativa para ayudar a normalizar de forma natural la zona uterina.
Esta entrada va a analizar las mejores maneras para mejorar la salud uterina en mujeres con fibromas.
Se exploran tanto enfoques dietéticos suaves como de hierbas, que puedes sopesar con tu médico o profesional de la salud holística natural.
¿Qué son los miomas uterinos?
Los miomas o fibromas uterinos son crecimientos cuyo tamaño varia entre el tamaño de una nuez y/o una naranja que aparecen en o dentro de las paredes uterinas.
Y pueden ocurrir individualmente o en «racimos».
La mayoría de los fibromas no son cancerosos y, según algunas estimaciones, tienen menos de 1/2 de 1% de probabilidades de convertirse en cancerosos antes de la menopausia.
Síntomas de los fibromas uterinos
Si bien muchas mujeres con fibromas uterinos no muestran síntomas de esta condición, algunas mujeres pueden experimentar uno o más de los siguientes:
- Períodos pesados o dolorosos
- Sangrado entre períodos
- Sensación de plenitud en la parte baja del abdomen
- Presión pélvica o dolor
- estreñimiento
- Dolor durante el sexo
- Necesidad frecuente de orinar
- Dolor en la parte baja de la espalda
- Problemas reproductivos (tales como infertilidad, abortos múltiples o parto prematuro)
La mayoría de mujeres con fibromas uterinos pueden quedar embarazadas naturalmente, otras pueden tener dificultades para concebir.
Es más, algunas mujeres embarazadas con fibromas uterinos pueden tener un riesgo ligeramente mayor de problemas tales como aborto espontáneo, parto prematuro y parto.
Así como posición fetal anormal.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, los fibromas uterinos no son propensos a complicar el embarazo.
¿Qué causan los fibromas uterinos?
Aunque se desconoce la causa exacta de los fibromas uterinos, se cree que ciertos factores genéticos y hormonales pueden desempeñar un papel en su desarrollo.
Por ejemplo, las hormonas estrógeno y progesterona pueden estimular el crecimiento de los miomas uterinos.
Los siguiente factores pueden aumentar el riesgo de fibromas uterinos:
- Obesidad
- Antecedentes familiares de fibromas uterinos
- No haber dado a luz
Además, las mujeres afroamericanas tienen un riesgo entre tres y cinco veces mayor que las mujeres blancas de padecer fibromas.
Tratamiento para los fibromas uterinos
Debido a que los fibromas uterinos pueden conducir a ciertas complicaciones (por ejemplo, anemia por pérdida severa de sangre), es crucial consultar al médico si experimentas síntomas asociados a esta condición.
El tratamiento estándar para los fibromas uterinos por lo general implica el uso de medicamentos que ayudan a aliviar los síntomas y a ralentizar su crecimiento.
El tratamiento también puede incluir procedimientos quirúrgicos como la miomectomía, que elimina los fibromas, pero deja las zonas sanas del útero en su lugar.
Tratamiento alternativo para los fibromas uterinos
Opciones dietéticas para fortalecer el útero de mujeres con fibromas uterinos
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Seguir una dieta vegetariana pobre en grasa: Investigadores italianos dieron a conocer a Obstetrics and Gynecology, que el consumo de carne roja duplica el riesgo de desarrollar fibromas uterinos.
En cambio, seguir una dietan vegetariana reduce riesgo de fibroides a la mitad.
Una dieta basada en vegetales puede aliviar los síntomas reduciendo la inflamación y mejorando el metabolismo.
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Reducir el consumo de cafeína: La cafeína puede agravar los fibromas al aumentar la producción de estrógeno.
Los receptores de estrógeno son más elevados en tejido fibroide.
El consumo de 500 miligramos de cafeína diarios, equivalente a 4-5 tazas de café, contribuye a producir 70% más de estrógenos en la fase folicular del ciclo menstrual de las mujeres que consumen menos de 1 taza de café.
Algunas mujeres informan que pueden beber té verde o blanco sin efectos negativos.
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Té Verde
En un estudio en animales publicado en 2010, los científicos descubrieron que un tratamiento de ocho semanas con extracto de té verde lograron una reducción significativa en el volumen y peso de los fibromas uterinos entre un grupo de ratones.
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Una limpieza corta realmente puede ayudar: Una dieta jugos de vegetales durante 24 horas ayuda a limpiar residuos ácidos y disminuye la congestión del cuerpo.
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Comer verduras crucíferas como el brócoli, coliflor, repollo y coles de Bruselas 3 – 4 veces a la semana: El Indol 3 carbinol de estos vegetales mejora el metabolismo del estrógeno y la capacidad del cuerpo para eliminar el exceso de estrógenos.
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Aumentar la fibra en la dieta para el equilibrio natural del estrógeno: Una dieta rica en fibra contribuyen a que los niveles de estrógeno en circulación sean más bajos.
Es tan sencillo como comer frutas a diario para mantener el transito intestinal de forma normal.
Hierbas y otras terapias para fortalecer el útero
Ciertas hierbas y cortezas pueden ayudar a recuperar el equilibrio del cuerpo, de forma natural.
Recomendado: lapacho
Pau d’Arco (Tabebuia heptaphylla): Una potente hierba antibacteriana para ayudar a mantener el tejido uterino sano, también es conocido como lapacho>.
Cohosh Negro (Actaea racemosa): Ayuda a relajar el útero y a tener un ciclo menstrual sano.
La investigación en China temprana demuestra una reducción en el tamaño de los fibromas con el uso de cohosh negro.
Diente de león (Taraxacum fuera): Apoya la desintoxicación para mantener el hígado sano y el metabolismo hormonal.
El diente de león tiene un ligero efecto diurético para reducir la hinchazón y la congestión abdominal.
Acupuntura
Mediante una revisión de la investigación publicada en 2010, los investigadores buscaron todos los ensayos controlados aleatorios que compararon la acupuntura con otros tratamientos (por ejemplo, medicamentos) en el tratamiento de los miomas uterinos.
Al no encontrar ningún estudio disponible suficientemente bien diseñados, los autores de la revisión concluyeron que «la eficacia de la acupuntura para el manejo de los fibromas uterinos sigue siendo incierta».
Las terapias naturales pueden ayudar a traer su cuerpo de vuelta al equilibrio si estás tratar con fibromas uterinos.
Enfoques médicos pueden ser necesarios para algunas mujeres, pero incluso en estos casos, las terapias naturales suaves pueden guiar el cuerpo de una mujer para una recuperación más rápida.
No obstante, es importante consultar al médico antes de usar cualquier tipo de medicina alternativa en el tratamiento de esta condición.
El auto-tratamiento y evitar o retrasar el cuidado estándar pueden tener serias consecuencias.
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