Las personas que han sido diagnosticados con anemia, cuyas características principales son bajos niveles de hemoglobina y células rojas de la sangre, y a menudo es causa de fatiga, falta de aliento o problemas del corazón, tienen un riesgo cercano al 50% de probabilidades de llegar a desarrollar demencia en comparación con aquellos que no sufren de anemia.
Debido a la prevalencia de la anemia y la demencia en la población anciana, la Dra. Kristine Yaffe, de la Universidad de California, San Francisco, investigo una posible relación entre las dos condiciones, de tal modo que llego a la conclusión de que la anemia puede aumentar el riesgo de demencia en las personas mayores de 65 años, el estudio fue publicado en The Jounal Neurology.
Para dicho estudio se contó con una muestra poblacional de 2500 personas de ambos sexos, cuyo rango de edades era superior a los 70 e inferior a los 80 años, abarco un período de 11 años, durante el cuál cada uno de los participantes en el estudio se sometieron a una serie de pruebas períodicas tanto de memoria como de aprendizaje.
Dentro del grupo diagnosticado con anemia, el 23 por ciento desarrollaron demencia, en comparación con el 17 por ciento de los que no estaban anémicos. En general, las personas con diagnóstico de anemia al inicio del estudio mostraron casi un 41 por ciento más riesgo de desarrollar demencia que los que no estaban anémicos.
Tomamos en cuenta una serie de factores que podrían explicarlo, hemos ajustado en base a edad, educación, problemas de salud de diversa índole, dijo Yaffe. Y sigue siendo una relación muy alta, que nos hizo pensar en la anemia como su causa.
Aunque el estudio no examinó los mecanismos subyacentes, los autores sospechan que las personas con anemia pueden ser más susceptibles a la demencia porque el cerebro experimenta una disminución del suministro de oxígeno.
La hemoglobina es la proteína principal en las células rojas de la sangre, y se une al oxígeno. Siendo transportada por el oxígeno a través del cuerpo, el principal mecanismo que puede explicar esta conexión es que el cerebro no está recibiendo la cantidad suficiente de oxígeno porque el nivel de la hemoglobina es bajo, debido a la anemia.
Cuando el cerebro no recibe suficiente oxígeno, las neuronas pueden ser dañadas, lo que lleva a problemas cognitivos. también se pueden dar pequeños accidentes cerebrovasculares, y la persona podría no enterarse.
La anemia es causada por una variedad de factores, incluyendo la deficiencia de hierro, deficiencia de vitamina B12, ciertos medicamentos, u otras condiciones médicas, como la enfermedad renal. La anemia se diagnostica con un simple análisis de sangre y puede generalmente ser manejada una vez descubierta, lo mejor es que las personas mayores controlen sus niveles de hemoglobina con un médico cada año y estén al tanto de la posible conexión entre la salud del cerebro y la anemia.
Relacionamos la anemia con la salud del corazón, el cansancio, dificultad para respirar, pero hasta la fecha nunca se habían planteado nexos con el cerebro. Así que la comprensión de que la anemia puede estar conectado con problemas en la memoria es importante, así como destacar su papel y saber que podría ser una manera de conectar los problemas cognitivos.