En un primer estudio sobre las experiencias con la conducción de personas adultas con autismo, los investigadores de the Drexel University encontraron diferencias significativas en el comportamientos y percepciones de la capacidad de conducir en comparación con los adultos no autistas.
A medida que la población de adultos con autismo crece rápidamente, la encuesta proporciona un primer paso para identificar si esta población tiene necesidades insatisfechas para que los centros educativos autoricen la conducción segura.
Un elemento clave del funcionamiento independiente en las vidas de muchas personas.
Investigaciones previas en mi laboratorio han incluido una investigación exhaustiva en la capacidad de conducción con personas que tienen una variedad de condiciones tales como esclerosis múltiple o que habían sufrido una lesión cerebral traumática, dijo la coautora del estudio PhD Maria Schultheis, profesora asociado de psicología en Drexel University.
Cuando investigamos en qué circunstancias una condición o diferencia neurológica puede afectar la capacidad de conducción, como norma queremos averiguar cuáles son los problemas desde su propia perspectiva que están teniendo en la experiencia del mundo real.
Autismo y conducción
Esa pregunta es fundamental para formar e informar los objetivos de la investigación a largo plazo y es especialmente importante cuando nos volvemos a ver una diferencia en el desarrollo como en el autismo, donde ha habido muy poca investigación para establecer si existen dificultades generalizadas de conducción.
Sólo unos pocos estudios previos han examinado la capacidad de conducción en las personas con autismo.
Los estudios se han enfocados en adolescentes y nuevos conductores en lugar de conductores adultos experimentados con autismo, estudios que se basaron en encuestas sobre el padre y las evaluaciones de aspectos discretos de conducción.
El nuevo estudio de Drexel, publicado este mes en the Journal of Autism and Developmental Disorders, utilizaron una encuesta validada, que ha sido ampliamente usada en la investigación.
Se les pidió a los conductores adultos con autismo describir sus experiencias de primera mano en el mundo real de la conducción.
Empezamos a ver como se analizan las investigaciones relativas a aspectos de trastornos del espectro autista, como retos neurocognoscitivos y las dificultades de reconocimiento social, podrían hacer probable que las personas con autismo experimentaran desafíos significativos en la conducción, dijo el autor principal del estudio PhD Brian Daly, profesor asistente de psicología en la Facultad de Artes y Ciencias de Drexel.
Pero estas premisas no se habían estudiado en conductores adultos o las experiencias de los propios conductores, razones por las que hemos investigado esas posibilidades.
En esta encuesta, los adultos con trastornos del espectro autista informaron que en promedio habían obtenido las licencias de conducción en una edad más avanzada, con menos horas de conducción y poniéndose más restricciones en su comportamiento a la hora de conducir.
Por ejemplo, evitar conducir en las autovías o por la noche, en comparación con los adultos no autistas.
Los encuestados con trastornos del espectro autista también informaron de más violaciones de tráfico.
Los adultos autistas han reportado conducir con menos frecuencia y restringir sus propios comportamientos de autoconciencia en las dificultades o deficiencias en su conducción.
Estas dificultades o la menor cantidad de horas conducidas podrían explicar la mayor tasa de violaciones divulgadas, es posible que los encuestados en el espectro del autismo fueran más honestos en sus respuestas.
En la investigación, se pudo establecer que las personas tienen un sesgo positivo al informar de sus propia habilidades de conducción, dijo Schultheis.
Porque el estudio se basó en las propias respuestas de los sujetos implicados en el estudio, no podemos descartar si los encuestados con autismo simplemente estaban siendo más descriptivo y honesto acerca de sus dificultades que el grupo control.
Este es un importante estudio, según PhD Paul Shattuck, profesor asociado y director del área de investigación en los programa de los resultados de los curso de la vida en el Instituto de autismo A.J. Drexel, que no tuvo participación en la realización del estudio.
los adultos en el espectro del autismo se enfrentan a muchas barreras cognitivas para poder ser plenamente insertado en la sociedad, facilitar el acceso a las opciones de transporte aumentará la capacidad de estos adultos contribuir a sus comunidades.
Si la vida es dura, en términos generales, para una persona que padece d autismo debe ser más aún, así que la próxima vez que te vayas a quejar, recuerda que alguien esta peor que tu.
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