Las estatinas y el cáncer de páncreas: una posibilidad
Las estatinas o inhibidores de la reductasa de la HMG-CoA, incluyen simvastatina, atorvastatina, fluvastatina, lovastatina, pitavastatina, pravastatina, rosuvastatina. Estos fármacos en particular se usan para reducir los niveles de colesterol mediante la inhibición de una enzima que ayuda en la síntesis del colesterol en el hígado. Se utilizan a menudo por personas que han sido diagnosticadas con diabetes tipo 2 y que también tienen niveles altos de colesterol. La razón principal es para evitar un ataque al corazón.
Los diabéticos tienen un riesgo de desarrollar cáncer de páncreas, que tiene un mal pronóstico. Investigadores de Norfolk y Norwich University Hospital en el Reino Unido, realizaron un estudio para descubrir si el uso de estatinas podría reducir el riesgo de la enfermedad.
El estudio, publicado en la revista Digestive Diseases and Sciencesen julio de 2013, incluyo:
- 252 pacientes con cáncer de páncreas
- 504 personas sin cáncer.
Veintitrés por ciento de los pacientes con cáncer eran usuarios de estatinas … frente al 21 por ciento de los participantes sin cáncer. Sin embargo, en los hombres fumadores que tomaron regularmente estatinas el riesgo de cáncer de páncreas era de un 89 por cien menor. A partir de esta información se concluyó que el uso de estatinas se debe investigar más para prevenir el cáncer de páncreas en los hombres fumadores.
Por otro lado, los investigadores de la Universidad de Tokio en Japón encontraron que los pacientes que recibían tratamiento para el cáncer de páncreas tenían un mejor pronóstico si también estaban siendo tratados con estatinas. Su estudio fue publicado en marzo 2013 en la revista páncreas.
Doscientos cincuenta pacientes que estaban siendo tratados con quimioterapia para el cáncer de páncreas se incluyeron en el estudio.
124 de estos pacientes tenían diabetes
Los pacientes tratados con estatinas sobrevivieron 3,3 meses más que los que no usaban estatinas. Por tanto, se concluyó que el uso de estatinas mejoró significativamente la supervivencia.
Más investigación dará más respuestas en cuanto a cómo las estatinas u otros fármacos pueden ser útiles en la prevención o el tratamiento de cáncer de páncreas. Por el momento, el Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos ha emitido una declaración sobre la prevención del cáncer en la diabetes tipo 2. De acuerdo con el NIH la tasa de mortalidad de páncreas y otros tipos de cáncer se puede bajar:
con el tratamiento para la obesidad y los niveles altos de insulina,
consecución de un buen control del azúcar en sangre, y el
diagnóstico temprano de cáncer de páncreas.
Los pacientes diabéticos que sufren de poco apetito, pérdida de peso, fiebre de bajo grado, y los ojos, así como la piel a veces amarillentos, en caso de existir la sospecha de cáncer de páncreas, se hace imperativo el uso de pruebas de imagen, ciertos análisis de sangre y biopsias para eliminar dicha posibilidad.
Esperemos con fe que se sigan haciendo más pruebas para saber mejor si las estatinas y el cáncer de páncreas representan una posibilidad para los enfermos.
