Que los intestinos son la clave para sobrevivir al cáncer es una de los más importantes hallazgos en el campo de la medicina, que se veía enfrentada a la paradoja del cáncer: curar o matar al paciente, debido a que las altas dosis de quimioterapia pueden eliminar con eficacia las células cancerosas.
Pero el exceso de radiación en última instancia, puede matar al paciente antes que el tumor.
Sin embargo, un nuevo estudio afirma haber encontrado una manera de mantener a los pacientes sanos y vivos, mientras le administran altas dosis de quimioterapia, un hallazgo que podría revolucionar los tratamientos de cáncer.
Según el autor principal Jian-Guo Geng, profesor asociado en el departamento de ciencias biológicas en la Universidad de Michigan, los dos sistemas en el cuerpo más afectadas por la quimioterapia son las células epiteliales gastrointestinales y la médula ósea en el sistema esquelético.
Estos dos sistemas están en constante regeneración y autoreparación a un ritmo más rápido que otros sistemas del organismo.
Por lo tanto son mucho más vulnerables a los efectos tóxicos de la quimioterapia y la radiación.
Esto explica por qué los principales efectos secundarios de la quimioterapia incluyen diarrea, estreñimiento, náuseas y vómitos, así como diversos trastornos de la sangre.
Células madres Los intestinos son la clave para sobrevivir al cáncer
Lo que encontramos es una manera de estimular las células madre intestinales, dijo Geng.
Las células madre pueden reparar el daño causado por la radioterapia y la quimioterapia, por lo que los pacientes tolerarán la quimioterapia mucho mejor,.
Al mismo tiempo que le da suficiente espacio para que los médicos utilicen una dosis alta de quimioterapia para eliminar las células cancerosas y el paciente puede sobrevivir.
Los investigadores teorizaron que mediante el aumento de las células madre en el intestino, tanto el intestino como el tracto gastrointestinal estarán mejor protegidos de los efectos de la quimioterapia, lo que permitirá a los pacientes con cáncer ingerir nutrientes y realizar funciones críticas sin liberar toxinas intestinales en la sangre.
Con los pacientes más tolerables a la quimioterapia, puede utilizarse quimioterapia con más frecuencia.
Actualmente no dan a un paciente una dosis muy alta, debido a las complicaciones ya conocidas de dicha terapia, no sólo la adición de esta proteína podría potencialmente ayudar a los pacientes a sobrevivir altas dosis de quimioterapia, sino que también puede ayudar a mitigar los efectos secundarios tóxicos de la radiación, haciendo que los pacientes enfermen menos y estén mucho más cómodo a lo largo de sus tratamientos contra el cáncer.