Deje en paz la cera de los oídos
Millones de personas cada año verán al médico para a que tienen un tapón de cera en el oído.
En Internet, podrá encontrar innumerables productos, desde sueros hasta velas para la limpieza de los oídos, la mayoría de ellos además de ser una estafa, en algunos casos podrían terminar causando daños a quien los use.
Cuando nos levantamos por la mañana y luego de tomar una ducha, coger un bastoncillo o hisopo de algodón para quitar la cera, es algo rutinario, que nos han vendido en las películas y además parece ser un gesto higiene.
Pero en realidad, la cera del oído o cerumen, se produce precisamente en los oídos de forma natural para limpiar y proteger el delicado cartílago de la intrusión de bacterias y hongos. Es un producto natural que es beneficioso para la salud, y necesaria para los oídos.
Entonces, es ridículo intentar deshacerse de ellos.
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Limpiar tapón de cera en el oído
Cada vez que masticamos, la cera del oído es empujada hacia el exterior, llevando consigo toda el material que puede acumularse en el canal auditivo: polvo, partículas, suciedad y en particular las células muertas de los tímpanos.
El cerumen es rico en ácidos grasos saturados, como la lisozima, la cual de hecho proporciona una excelente protección contra las bacterias dañinas, especialmente Staphylococcus aureus y Escherichia Coli.
Por último, contrariamente a lo que a veces dicen, la cera del oído no impide escuchar.
En cambio, gracias al colesterol, a los ácidos y alcoholes de cadena larga que contiene, lubrica y previene la sequedad y la picazón de la piel dentro del conducto auditivo externo, y ayuda a mantenerla joven.
Si ambos oídos producen cera como se ve desde el exterior y siente la necesidad obvia de limpiarla, puede utilizar agua, jabón o un hisopo de algodón, pero es importante que solo lave el oído y la entrada del conducto, pero sobre todo, que ninguna sustancia penetre hasta el interior.
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¿Qué hacer con los tapones grandes?
Es fundamental entender que la cera del oído no es en absoluto la cera: es una sustancia soluble en el agua. Esto significa que, incluso si tiene un tapón duro grande atascado en el conducto auditivo externo, no necesitas comprar productos comerciales caros.
Sólo deje correr un poco de agua a la temperatura corporal, en la oreja y luego dejar a la naturaleza que haga su trabajo. El efecto mecánico de las mandíbulas, cuando come, efectivamente empujará dicho tapón lentamente hacia el exterior.
Pero no estar hurgando con un hisopo de algodón una y otra vez, con el riesgo de daño del tímpano.
Las velas de limpieza para limpiar un tapón de cera en el oído
Las velas de limpieza se ofrecen para la venta con algún atributo añadido para las virtudes espirituales, tales como el balance energético.
Este es un tema que hasta risa da, esas velas son un timo en toda la corta extensión de la palabra, lo siento por aquellas personas que son tan ingenuas y piensan que funcionan, el tiempo se encarga de hacerles ver la cruda realidad, puesto que es evidente que esas velas lo único que limpian es el bolsillo del incauto que confío en un vendedor inescrupuloso.
Los vendedores explican que estas velas, al quemarse, limpian la cera por aspiración pero en realidad, el vacío causado por la quema de la vela es demasiado bajo para poder aspirar el cerumen. Por el contrario, la experiencia demuestra que es más bien la cera de la vela la que puede terminar en los oídos.
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En cuanto a quienes que dicen que el calor de la vela derretiría la cera, un experimento llevado a cabo en 2007 en Canadá midió la temperatura de la vela, mientras se quemaba. La temperatura máxima que alcanzó fue de 22 ° C, la cual está muy por debajo de la temperatura del cuerpo que varía entre 36.1 ° C y 37,8 ° C. Por lo tanto, el estudio demostró la imposibilidad de que una vela pueda derretir la cera del oído.
