La mayorÃa de las personas damos por sentado el control de la vejiga.
Pero alrededor de un tercio de las personas entre 30 y 70, tienen problema serios de incontinencia.
Sin embargo, hay medidas que se pueden tomar para mantener la vejiga saludable y minimizar los problemas si sufres de incontinencia.
La incontinencia urinaria es vergonzosa y aislante, Las personas pueden dejar de participar en actividades que les gusta hacer, puede incluso degenerar en obesidad.
El funcionamiento diario de la vejiga puede decir mucho acerca de la salud en general.
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¿Con qué frecuencia orinas durante el dÃa y la noche? ¿Cuál es el color de la orina? ¿Puedes mantener bajo control la micción?
Las respuestas a dichas interrogantes proporcionan pistas sobre otras condiciones de salud que no implican el sistema urinario.
El 80% de las causas de problemas de la vejiga se relaciona con condiciones ajenas a la vejiga.
Pueden incluir problemas con los sistemas nerviosos o cardiovasculares.
La vejiga puede indicar que enfermedades padeces
Las siguientes son algunas de las enfermedades que la vejiga puede detectar de forma precoz.
1. Apnea del sueño
Cada vez son más frecuentes el diagnosticado por urólogos.
Eso es porque los médicos regulares no pueden verlo durante chequeos; es la micción de noche que se ha dado cuenta primero.
En hombres de 55 a 75 que sufren de agrandamiento benigno de la próstata (BPE) y de nicturia, necesidad de levantarse por la noche a orinar, más de la mitad de sus despertares nocturnos pueden ser atribuidos a la apnea del sueño.
¿Qué puedes hacer? Consulta con tu médico sobre el exceso de micción por la noche para intentar localizar la causa real del problema.
2. Diabetes fuera de control
Cuando el azúcar en la sangre está mal controlada, puede causar daños en los nervios. Los diabéticos generalmente saben que puede resultar en una pérdida de sensibilidad en las extremidades.
Pero las señales nerviosas también pueden ser capaces de afectar los músculos que controlan la micción.
Con frecuencia sientes la necesidad de usar el baño, incluso cuando no tienes orina que eliminar.
O notar la falta de la sensación que avisa de la necesidad de ir a orinar y terminas por orinarte encima.
También puedes estar excretando cantidades de orina mayores de lo normal por una mala gestión de la diabetes.
Es el cuerpo intentando eliminar el exceso de glucosa a través de la orina.
Habla con tu médico sobre una mejor gestión del azúcar de sangre a través de dieta y ejercicio.
3. Hipotiroidismo y la salud de la vejiga
El funcionamiento lento de la glándula tiroides , de una glándula clave para regular el metabolismo, también puede causar problemas en la forma en que las señales nerviosas alcanzan los músculos. Las mujeres a menudo son más afectadas que los hombres.
Puedes notar la incontinencia de urgencia, o la necesidad de ir, con necesidad real o no.
Suele ser un sÃntoma secundario de hipotiroidismo, los sÃntomas primarios suelen ser fatiga extrema, una sensación de frÃo, aumento de peso, piel seca y a veces la caÃa del pelo.
Comunica los sÃntomas a tu médico y menciona cualquier otro sÃntoma inusual que estés experimentando.
4. Problemas relacionados con la próstata afectan la vejiga
La próstata, una glándula en forma de rosquilla que rodea la uretra masculina y desempeña un papel en la micción y reproducción, tiende a aumentar con el tiempo.
Presionando la uretra (pasaje urinario), causando una condición relativamente inofensiva llamada hiperplasia prostática benigna (HPB).
La HPB es común en hombres mayores de 50 años, como el cáncer de próstata.
Otra complicación de la próstata, más común en hombres jóvenes, es la prostatitis una infección.
Una de estas condiciones no conduce necesariamente a la siguiente.
Puedes notar una necesidad repentina y urgente de orinar (incontinencia), despertar por la noche para ir al retrete, la orina continua goteando después de que crees que has terminado.
Otros sÃntomas son: dificultad para comenzar a orinar y micción más frecuente ya sea durante el dÃa o por la noche.
Debido a que los problemas de la próstata varÃan en gravedad pero pueden manifestarse de diferentes maneras, cualquier cambio en los sÃntomas urinarios vale la pena informar tan pronto como lo detectes.
5. Infección crónica del tracto urinario (ITU’s)
Son las infecciones que ocupan el segundo lugar de las más frecuentes en el cuerpo humano.
Tanto hombres como mujeres pueden sufrirlas, aunque son más comunes en las mujeres.
Puedes notar una persistente necesidad de orinar, ardor al orinar, micción frecuente, orina turbia o rojiza y a veces fétida.
También puedes experimentar fiebre, dolor localizado y una sensación de presión.
Los antibióticos recetados generalmente eliminan la infección en un lapso no mayor a dos dÃas.
Las personas que sufren infecciones urinarias de forma repetitiva a tienden a tener condiciones subyacentes que les predispone (como diabetes o embarazo) o hábitos que las promueven.
Las mujeres con infecciones urinarias crónicas deben usar toallas sanitarias en lugar de tampones, evitar las duchas vaginales, orine antes y después del acto sexual.
Consulta con tu médico y evita el consumo excesivo de alcohol o cafeÃna, que son irritantes para la vejiga.
6. La salud de la vejiga y el sobrepeso
Probablemente no necesitas la vejiga para decirte lo que tu espejo y la báscula ya saben.
Pero los efectos de la obesidad a veces son fáciles de ignorar, al menos hasta que las dificultades cotidianas son imposibles de negar.
El exceso de peso implica que los músculos del piso pélvico que soportan el sistema urinario de la mujer están sometidas a una presión extra.
Con el tiempo, pueden debilitarse, especialmente el esfÃnter urinario, que mantiene la uretra tapada cuando no estás orinando.
Puedes notar fugas de orina al toser, estornudar, cuando haces ejercicio o cualquier movimiento extraño, llegando al tipo de estrés fÃsico que se conoce como incontinencia por estrés.
Perder un 10% de peso corporal, podrÃa significar una reducción del 50% en tus episodios de incontinencia semanal.
7. Cistitis intersticial
Es un trastorno inflamatorio crónico de la vejiga, incluyendo irritación del revestimiento de la vejiga y la pared.
La cistitis intersticial, también conocida como sÃndrome de vejiga dolorosa, afecta a ambos sexos, especialmente a las mujeres.
La causa no es totalmente desconocida.
A menudo está asociado con otros sÃndromes de dolor, como la fibromialgia, sÃndrome de intestino irritable y sÃndrome de fatiga crónica, migrañas, depresión y trastornos del sueño.
También puedes notar micción muy frecuente (varias veces por hora, todo el dÃa), dolor al orinar, dolor generalizado en el área pélvica.
El dolor generalmente se experimenta por brotes que pueden estar relacionadas con la menstruación, con relaciones sexuales, estrés y enfermedad.
A menudo se asemeja a una infección urinaria, pero la prueba no muestra ninguna evidencia de bacterias.
No existen pruebas confiables o remedios para la cistitis intersticial, pero un examen médico puede apuntar al tratamiento de otras causas posibles de los sÃntomas.
El tratamiento de la cistitis intersticial se suele centrarse en medicamentos y cambios de estilo de vida que pueden ayudar a los enfermos a mejorar los sÃntomas.
8. CaÃda de órganos o prolapso
Especialmente después del parto, las mujeres son vulnerables a una condición llamada prolapso de la vejiga, que es a la caÃda del órgano desde su posición habitual, a veces dentro de la abertura vaginal.
Esto sucede porque la hamaca que soporta los músculos del piso pélvico y los ligamentos de la vejiga ha sido debilitada por el estrés.
Levantar objetos pesados, tos crónica (debido a fumar), obesidad y la menopausia (debido al cambio hormonal) también pueden provocar el prolapso.
PodrÃas notar la necesidad frecuente de orinar o urgencia incontinencia.
No sientes alivio después de orinar, malestar o dolor en la vagina, pelvis, ingle o espalda, pesadez en el área vaginal (que puede aliviar al acostarse).
Para los casos leves, apuntalar los músculos débiles con terapia fÃsica puede ser eficaz.
Casos más extremos pueden necesitar estimulación eléctrica o un pesario (dispositivo de apoyo vaginal) para proporcionar un mejor soporte para los órganos. La cirugÃa puede eficaz como último recurso.
9. Deshidratación
Significa simplemente que los niveles de lÃquidos en el cuerpo son mÃnimos.
Cualquier persona puede deshidratarse, aunque los adultos mayores son especialmente más vulnerables.
Causas comunes: Diarrea o vómitos, sudar mucho a través del ejercicio o debido a fiebre y ser diabético.
Puedes notar que la orina es anormalmente oscura (ámbar a café) o que despide un olor fuerte.
Otros sÃntomas de deshidratación: Disminución de la diuresis, dolor de cabeza, letargo o somnolencia, piel seca y boca seca, mareo y sentimiento de confusión.
El incremento del consumo de lÃquidos resuelve la deshidratación.
Al existir distintos grados de deshidratación, lo mejor es que un médico te sugiera una solución para la rehidratación oral.
10. Cáncer
Puede desarrollarse cáncer en la vejiga, los riñones, la pelvis renal (la zona de los riñones donde se recoge la orina) o el uréter (los conductos que trasportan la orina desde los riñones hasta la vejiga).
El cáncer de células transicionales de la pelvis renal y uréter es una forma común de cáncer.
Puedes notar que la orina, adquiere un tono rosado, marrón o rojo, debido a la presencia de sangre, dolor al orinar o una necesidad frecuente de orinar o no producir orina.
Por lo general en los hombres, los tumores también pueden bloquear el tráfico normal de la orina y causar incontinencia por desbordamiento, la salida de orina carece de control.
¿Qué puedes hacer?: Ver un médico de forma urgente.
Los sÃntomas que podrÃan indicar cáncer del sistema urinario pueden significar distintas condiciones además de cáncer.
Pero siempre es imperativo la ayuda médica, para descartar otros problemas y determinar un diagnóstico.
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