Todos estamos de acuerdo que las habilidades de comunicación adecuadas por parte del oncólogo, son esenciales para una mejor atención del cáncer.
Si bien algunos pacientes aprecian el enfoque directo del médico, otros necesitan una mano suave.
Algunos oncólogos, médicos especialistas en cáncer, tienen buenas maneras, mostrando una genuina empatía con sus pacientes.
Otros pueden ser considerados prácticamente «matones» de bata blanca.
Pero todo se reduce a esto … lo que diga o deje de decir el oncólogo puede ser determinante en el resultado.
Los médicos con frecuencia toman un papel excesivamente dominante.
A menudo tratan a pacientes proactivos con sarcasmo o arrogancia.
El paciente que ha investigado a menudo se ve obligado a escuchar palabras como:
Veo que ha pasado algún tiempo en internet, creo que es mejor si me deja diagnosticar y decirle cual es el tratamiento más adecuado para usted.»
Peor aun, de forma despectiva, o como mínimo con sorna.
El tratamiento del cáncer requiere una relación amigable entre el oncólogo y el paciente.
El paciente tiene que estar cómodo y seguro de que el tratamiento elegido es la mejor opción para su caso personal.
Son lamentables los terribles comentarios hechos por los oncólogos a sus pacientes.
Incluso aquellos pacientes que tienen la intención de cumplir con las recomendaciones del oncólogo escuchan palabras que nunca deberían ser dichas.
Hay que entender que estos comentarios no pretenden ser insensible.
Que solo hablan desde la ignorancia.
12 «consejos» que nunca deberías oír del oncólogo
Es importante estar pendiente de los médicos que manejan cualquiera de estos criterios. Podría ser una señal de que necesitas un ajuste de actitud… o que necesitas cambiar de médico especialista en cáncer.
Me temo que tengo malas noticia:
Si no sospecharas que tenías un problema que tratar, no estarías sentado en el consultorio del oncólogo.
Este tipo de declaraciones causan pánico!
Los médicos la utilizan para que las personas sigamos sus órdenes. Hay que comenzar por olvidar el drama médico.
Le quedan tres meses de vida:
Rara vez es útil tener un médico que «cree» tener una bola de cristal.
Si bien la experiencia da una idea de cuánto tiempo de vida tiene el paciente promedio para un diagnóstico en particular, todos somos personas y NO estamos en la media.
A pesar de lo que dice el oncólogo, siempre hay esperanza. Siempre hay una manera de prolongar la vida útil o incluso revertir la enfermedad.
Al igual que las «malas noticias», un pronóstico causa miedo y la necesidad de cumplir ordenes, aunque de una manera diferente.
Los estudios demuestran que las personas a quienes se les dice que tienen tres meses de vida, cumplen obedientemente con la directiva del médico.
Lo que es peor, un mal pronóstico quita las ganas de vivir, la capacidad de pensar y el deseo de cambiar la dirección de la enfermedad.
Hay innumerables remisiones de casos de cánceres en etapa avanzada y tardíos.
Hay un sinnúmero de historias de pacientes que tenían pocas posibilidades de supervivencia o de cura, sin embargo, años después son capaces de seguir contando su historia.
Personalmente viví el desahucio de una enferma de cáncer que se negó durante 10 años a aceptar dicho desahucio.
Fue tan grande su amor por la vida que murió primero el marido.
La esperanza nos da la oportunidad de hacer lo que tenemos que hacer para curarnos de cáncer.
Incluso frente a los cánceres más avanzados, por lo general, siempre hay espacio para palabras de aliento y apoyo.
Esto puede marcar toda la diferencia en la actitud del paciente hacia su enfermedad y su tratamiento.
Mientras hay esperanza, hay vida!
Si no sigue «X» recomendación va a morir:
Por alguna extraña razón, los oncólogos creen que lo saben todo.
Sí, lo sé fueron a la escuela de medicina, pero había medicina competente y eficaz mucho antes de que las grandes empresas farmacéuticas se enseñorearan en las escuelas de medicina.
Hay muchas opciones a la hora de gestionar el cáncer, no dejes que el oncólogo te intimide.
De hecho, es posible señalar al médico que tienes más probabilidades de morir si sigues uno de los protocolos estándar en lugar de optar por un plan de tratamiento menos tóxico.
No tienes elección:
Lo siento, doctor, sí hay!
Si bien siempre es una buena idea obtener una segunda, tercera o incluso cuarta opinión, asegúrate obtener al menos una opinión de un médico holístico o funcional.
De lo contrario, estás limitando tus opciones y podrían ser clave para la supervivencia.
Calmarse
Dada la situación actual, es comprensible que un paciente pueda estar alterado.
Decirle a una paciente que necesita calmarse o hablarle en un tono de voz dominante claramente demuestra una falta de empatía y no ofrece ninguna posibilidad de relacionarse amistosamente.
Este tratamiento no le hará daño
Asegúrate de dejar claro que significa DAÑO, con el oncólogo.
La quimioterapia, radioterapia, terapia hormonal, incluso la cirugía dañan el cuerpo y aumentan el riesgo de cáncer.
Hay que estar conscientes de los efectos secundarios potencialmente mortales y que amenazan la calidad de vida, al punto de comprender que no siempre «merecen la pena».
Estudios y estudios de casos no han proporcionado evidencia de la eficacia de dichos tratamientos.
Estas son las estadísticas
Eres una persona, no una estadística!
Tienes tu propio conjunto único de circunstancias; tu propia historia.
Las estadísticas son útiles para los médicos que usan una lista de control para hacer recomendaciones de tratamiento.
Cuando una persona se compromete con ella misma a realizar cambios de estilo de vida que pueden afectar su salud y el resultado, las estadísticas no funcionan.
Además, las estadísticas son típicamente sesgadas a favor de las recomendaciones de tratamiento.
Por ejemplo, un paciente puede oír que tomar terapia hormonal podría reducir el riesgo de recurrencia en casi un 50%.
¿Suena bien, verdad?
Sin embargo en la actualidad, puede ser el caso que el riesgo sin la terapia sea sólo del 2% y con la drogas del 1%.
La reducción del 50% realmente no significa mucho, ¿no?
O en el caso de la quimioterapia, un paciente puede oír que la terapia disminuirá el riesgo en un 30%.
Pero si el riesgo de morir es de sólo el 10%, para empezar, el beneficio de supervivencia en términos absolutos es sólo el 3%.
Teniendo en cuenta las desventajas de estas terapias, hay que extrapolar el verdadero beneficio y comparar esto con el posible daño que causan.
Este tratamiento te curará:
Esta es una declaración audaz con toda seguridad.
Si el oncólogo no está tratando la causa del cáncer, el tratamiento es imposible que lo cure.
El cáncer es complicado, pero la mayor parte o la causa fundamental puede ser determinada y resuelta.
Sólo entonces puede ser considerado cualquier tratamiento «curativo.»
Ninguna persona sufre déficit de tamoxifeno o de quimioterapia, por ejemplo, así que no hay razón para creer que tomar tamoxifeno o quimioterapia resolverá el motivo del cáncer.
Está perdiendo su tiempo con suplementos nutricionales:
Si bien no hay un remedio mágico capaz de curar el cáncer, factores de estilo de vida tales como tomar suplementos pueden marcar la diferencia.
Hay demasiada evidencia sobre la influencia de los factores nutricionales en la expresión genética para que nadie pueda ignorar el poder de los alimentos y suplementos.
Lo que comemos hace una diferencia de gran alcance.
Una dieta basada en alimentos enteros y el consumo de suplementos nutricionales pueden tener un impacto notable.
Dicho esto, en la actualidad, las condiciones del suelo caracterizadas por el agotamiento de nutrientes y el exceso de cultivo, impiden que los alimentos tengan el contenido de nutrientes que solían tener.
Además, una vida ocupada no siempre permite disfrutar de comidas «perfectas». Por lo tanto, los suplementos son una parte necesaria de un protocolo contra el cáncer.
El cáncer solo pasa
Es una cuestión de mala suerte.
Esto es tan ridícula que no debería ni mencionarse.
El cáncer se desarrolla por una razón. Es una señal, una llamada de auxilio que nos indica que algo o muchas cosas no están bien dentro del cuerpo.
La sobre exposición a toxinas, la incapacidad genética para manejar toxinas, así como la incapacidad para resolver traumas emocionales son algunos de los mayores desencadenantes de cáncer.
Si bien los déficit nutricionales probablemente no son la causa del cáncer, permiten su desarrollo y crecimiento.
No hay motivos para aceptar la declaración general del médico. Saber si dice esto por ignorancia o para su protección emocional, no es muy útil cuando se trata de la curación y supervivencia personal.
Así lucen las células de cáncer!
Médicos alternativos son charlatanes
La corriente principal de los oncólogos consideran como «alternativa» lo que una vez fue la medicina.
Por desgracia, la medicina moderna se centra en las terapias farmacológicas y no tiene en cuenta las razones por las cuales el cáncer se ha convertido en endémico.
No estamos enfermos porque tenemos cáncer … tenemos cáncer porque estamos enfermos!
Si no corregimos lo que creó el mal-estar, no podemos curarlo.
Los médicos alternativos o funcionales consideran a toda la persona.
Ellos creen que la persona es tan importante o más importante que enfocarse en los síntomas de cáncer (como un tumor).
Si bien cada tratamiento alternativo funciona para una persona, no todo tratamiento funciona para todo el mundo.
Parte de esto es, de nuevo, porque todos tenemos nuestras propias circunstancias únicas para tener cáncer.
Asegúrate de trabajar con un profesional cualificado que sea capaz de optimizar la curación del cuerpo, por ende, del cáncer.
Y por último pero no menos importante …
El estrógeno es la causa del cáncer de mama
Esto simplemente no es exacto.
El estrógeno cumple 400 funciones esenciales en el cuerpo femenino.
Si bien la dominancia del estrógeno y el desequilibrio hormonal pueden permitir que el cáncer de mama se desarrolle y crezca, el estrógeno no causa el cáncer de mama.
Más precisamente, el estrógeno puede activar los genes del cáncer.
Pero solo si no se opone a la progesterona.
Así que culpar a los estrógenos por el cáncer es un poco como pretender que las cerrillas causan incendios.
Hay que encender las cerillas, ¿verdad?
La progesterona actúa como un antagonista de estrógeno.
Mientras que el estrógeno se asocia el cáncer, la progesterona tiene efectos anticancerígenos.
Cuando se incrementa la fuerza de oposición de la progesterona, disminuye el efecto tóxico de los estrógenos.
Así que mientras que el estrógeno puede activar genes de cáncer, la progesterona activa genes que pueden impedir el cáncer de mama.
En lugar de bloquear o eliminar el estrógeno, hay que concentrarse en aumentar la progesterona.
Así se evita el fuego al no encender la cerilla.
Últimas palabras en torno a los oncólogos
Una nota sobre los receptores: cuando son activados por la progesterona, los receptores de progesterona se unen a los receptores de estrógeno.
Una vez que esto sucede, los receptores de estrógenos dejan de «encender» los genes que promueven el crecimiento de las células cancerosas.
En su lugar, se convierten en genes que promueven la muerte de las células cancerosas (conocido como apoptosis) y el crecimiento de células sanas, normales.
Los receptores de hormonas son dependientes de yodo, que aumenta la sensibilidad del receptor a la hormona para la que fue diseñado.
Así que en lugar de bloquear los receptores, sería prudente asegúrarse tener suficiente yodo en la dieta, de tal modo que los receptores puedan trabajar más eficientemente.
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Lo más importante…Tu salud
¡Te agradecería si me dieras a conocer tu experiencia con el oncólogo!
