Perder un par de horas de sueño por diversas razones es inevitable, los viajes, los hijos y los vecinos ruidosos nos pueden echar a perder el sueño.
Pero mantener un horario regular de sueño diario es vital para mantenerse saludable y activo.
Más de la mitad de los estadounidenses no duermen ocho horas cada noche.
Más de 60 millones de estadounidenses sufren de un trastorno del sueño. Si se pierden horas de sueño casi todas las noches, entonces podría enfrentar riesgos graves para la salud, como los que se mencionan a continuación.
1. Aumento de peso
En los Estados Unidos, más de un tercio de los adultos son obesos. Mucha gente sabe que la dieta y la falta de ejercicio son las cuasas principales de esta epidemia pero ¿el sueño?
Estadísticamente, quienes de forma regular duermen poco, menos de 6 horas por noche, son mucho más propensos a tener un promedio de índice de masa corporal por encima de la media.
por el contrario, las personas que duermen regularmente 8 horas tienen un índice de masa corporal más bajo.
Para entender por qué se da esta situación, necesitamos aprender algo sobre dos de las hormonas de nuestro organismo.
-
Grelina: Esta hormona estimula la respuesta de hambre. Es más elevada antes de las comidas y disminuye después de las comidas.
Junto con otras hormonas, trabaja para asegurar la adecuada regulación de hambre antes y después de comer.
-
Leptina: Esta es otra hormona que, en lugar de estimular el apetito, funciona de manera opuesta.
La función de la leptina es enviar señales al cerebro de que el cuerpo esta saciado y debe parar de comer.
Dicho de ora forma, la carencia de leptina vuelve incontrolable el apetito hasta comer de forma incansable.
Mientras dormimos, el cuerpo produce y regula estas hormonas, junto con muchas otras más. Si dormimos poco los niveles de hormona se desequilibran: la falta de sueño se asocia comúnmente con aumento en los niveles de grelina y reducción en los niveles de leptina.
No sólo el cuerpo tiende a consumir más, si no que los sistemas encargados del control de la alimentación no funcionan correctamente. Como resultado, las personas que no duermen lo suficiente tienen fuertes antojos de comida, que llevan a comer en exceso y a la obesidad.
Además, la insulina es una hormona que ayuda a regular el uso del azúcar y la energía de la sangre en el cuerpo. dormir poco también se a vinculado a un aumento creciente en la secreción de la insulina después de las comidas. El incremento en la producción de insulina está fuertemente asociada con aumento de peso.
Estos diversos desequilibrios hormonales pueden sabotear la salud y la dieta, llevando a una prevalencia de la obesidad.
Dicho de una forma más sencilla, la falta de sueño conduce a la fatiga, la fatiga evita hacer ejercicio, la falta de ejercicio evita quemar el exceso de calorías… el resultado es previsible.
2. Contribuye a la diabetes
La falta de sueño a largo plazo también puede resultar causando Diabetes tipo 2. Esto es debido a la forma en que el cuerpo utiliza la glucosa.
Anteriormente comprendimos que un sueño irregular conduce a niveles más elevados de insulina. La insulina transforma la glucosa para proporcionar la energía que el cuerpo necesita. Si se aumenta la producción de insulina, también se alteran los niveles de glucosa en el cuerpo. Si los problemas de la glucosa se vuelven crónicos podrían eventualmente permitir el desarrollo de la Diabetes.
En estudio se redujo el número de horas de sueño en personas sanas de ocho a cuatro horas por noche, así se pudo determinar que los participantes procesaban la glucosa más lentamente que cuando no tenían restricción y podían dormir a sus anchas.
Varios estudios epidemiológicos han indicado la conexión existente entre dormir poco y la diabetes.
3. Hipertensión y enfermedades cardíacas
Tan sólo una noche de mal dormir puede elevar la presión arterial al día siguiente.
Un estudio reciente en The European Heart Journal les hizo seguimiento a a 50.000 personas durante más de diez años. Los investigadores encontraron que quienes dormían mal eran más propensas a desarrollar insuficiencia cardíaca. De hecho, fueron tres veces más propensos a desarrollar insuficiencia cardíaca que las personas con un horario regular de sueño.
La causa se debe a las hormonas del estrés activadas por el sueño perdida, que a su vez dañan el funcionamiento cardíaco normal.
Sin embargo, la causa directa, si la hubiere, es confusa.
Los investigaciones similares han encontrado una estrecha conexión entre el sueño y la enfermedad del corazón, aun y cuando otros factores de riesgo como edad, peso, y estilo de vida fueron sacados de la ecuación.
La duración del sueño en un futuro será un elemento predictivo de enfermedades cardiovasculares.
La presión arterial alta también puede provenir de un trastorno del sueño durante la noche aparentemente inocuo como los ronquidos.
a apnea del sueño, en algunas personas, puede causar obstrucción de las vías respiratorias provocando que las personas se despierten bruscamente.
Este súbito despertar va acompañado de un aumento en la presión arterial.
En función del tiempo, también puede conducir a la hipertensión.
4. Irritabilidad
Es bien conocido que dormir mal o desvelarse es causa de irritación, algo que es fácil de detectar en las personas que no tienen un descanso adecuado, ya que se vuelven sumamente alterables y se irritan con nada.
La falta crónica de sueño o el insomnio de pleno derecho, a menudo está vinculados con la depresión. quien causa a quien es algo que no se conoce por completo. Del mismo modo, enfermedad bipolar y una variedad de trastornos mentales están asociados con problemas del sueño.
5. Enfermedades
Cuando alguien se enferma y trata de acostarse tarde, siente que no puede mantenerse despierto, debido a que su sistema inmunológico esta liberando sustancias para que el cansancio se acentúe y el enfermo se duerma.
Mientras el enfermo duerme, su cuerpo está mejor preparado para combatir infecciones.
Recomendado: 10 señales de ataques al corazón 30 días antes
Cuando dormimos menos, implica que el cuerpo no es capaz de producir los glóbulos blancos necesarios y defenderse a sí mismo.
Los estudios en animales han demostrado que las ratas que duermen con un sueño profundo son más capaces de responder a las infecciones que las ratas a las que se les priva de sueño.
6. Muerte prematura
De la variedad de problemas mencionados y algunos otros más, las personas que duermen cinco o menos horas son más propensos a morir de forma prematura. Su tasa de mortalidad es 15% superior a las personas que duermen ocho horas de forma regular.
Un quince por ciento podría parecer poco, pero cuando se suman los años de vida, es cuando se puede notar que es mucho más grande de lo que se piensa.
Si te ha gustado el artículo, te animo a dejar un comentario, sería estupendo que dejaras una crítica constructiva con los motivos por los que crees que vale la pena.
Demuéstrame que estas vivo, comentario abajo y dejame saber tu criterio.
Lo más importante…Tu salud