La levotiroxina es el fármaco más común para el tratamiento de las enfermedades tiroideas, se prescribe como medida para reemplazar la hormona tiroidea.
Es la versión genérica de la tiroxina sintética (T4).
Desafortunadamente, la mayoría de pacientes requieren más que simplemente aumentar los niveles de T4 para lograr el funcionamiento óptimo de la tiroides.
La glándula tiroides es un sistema complejo que involucra múltiples factores.
Cuando funciona correctamente, estas variables trabajan de forma armónica para que el cuerpo funcione en su punto óptimo.
Sin embargo, las personas que padecen condiciones de tiroides pueden experimentar alteraciones en todo el organismo.
El hipotiroidismo es la forma más común de trastorno de la tiroides.
Puede ser causado por múltiples problemas como:
- Pésima conversión de T4 a T3.
- Sobre conversión de T4 a T3 reversa.
- Problemas de transporte de la hormona.
- Otros factores específicos del paciente.
Para tratar adecuadamente las enfermedades de la tiroides, hay que reconocer que el enfoque de talla única de prescribir un fármaco sintético de T4 como levotiroxina raramente es el enfoque correcto.
Levotiroxina, tiroides y T4
La tiroides influye en casi todos los tejidos en el cuerpo y tiene un papel importante en la función metabólica.
Para lograr su cometido, utiliza varias hormonas tiroideas, incluyendo:
- T4.
- T3.
- T2.
- T1.
Las más frecuentemente estudiadas y quizás las más importante, de este grupo, son la tiroxina (T4) y triyodotironina (T3).
T4 es la forma inactiva de la hormona tiroidea que se debe convertir en T3, la forma activa de la hormona tiroidea.
Solo así puede tener un impacto positivo en el cuerpo.
Esta es la hormona responsable de regular numerosas funciones corporales.
Ciertos médicos creen que aumentando los niveles de T4 mediante levotiroxina es el método de solución idóneo a los problemas de tiroides.
Asumen que se convertirá correctamente en T3.
Desafortunadamente, los problemas de conversión son una causa frecuente en trastornos de la tiroides.
Agregar T4 a un sistema alterado probablemente hace más daño que bien.
Esto explica parcialmente por qué muchos pacientes continúan experimentando síntomas relacionados con la tiroides tales como:
- Aumento de peso.
- Depresión.
- Problemas en el funcionamiento cognitivo.
- Infertilidad.
- Fatiga.
- Disminución de la libido.
- Estreñimiento.
- Muchos otros más.
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A pesar de estar siendo tratados con medicamento para la tiroides, como la levotiroxina.
Señales engañosas
Una de las razones para que medicamentos t4, como la levotiroxina, se hayan convertido en el método estándar de tratamiento para las enfermedades tiroideas es porque influyen en los niveles de la TSH.
Comprobar los niveles de TSH es el método más generalizado para medir la salud de la tiroides.
Desafortunadamente, este enfoque pasa por alto un enorme porcentaje de personas con disfunción de la tiroides.
Este método de prueba no tiene en cuenta importantes factores tiroideos como la conversión de la hormona tiroidea y su transporte.
Al mejorar los niveles de T4, los médicos pueden normalizar niveles de TSH, olvidando tratar la verdadera causa de la alteración tiroidea.
Sin reconocer las causas y tratarlas adecuadamente, probablemente la persona continuara experimentando alteraciones de la glándula tiroides.
Aun y cuando esté tomando levotiroxina!
Problemas de conversión
Existen varias razones para que una persona no pueda convertir de forma eficaz T4 en T3.
Condiciones genéticas, deficiencias nutricionales (niveles bajos de selenio, ácidos grasos omega-3 y zinc) y la disfunción hormonal pueden contribuir a las dificultades de conversión.
Reducción en los niveles de la hormona T3 puede alterar todo el organismo y puede deberse a una pésima conversión de T4.
Algunos médicos no aprecian la importancia de este proceso y simplemente agregan más combustible en forma de T4 en un organismo disfuncional.
Parte de la razón de que esta práctica es particularmente peligrosa es por que T4 se puede convertir en más T3.
T3 reversa es la imagen espejo de T3 y actúa como inhibidor de la hormona tiroidea. Cuando el cuerpo convierte demasiada T4 en T3 reversa, la persona sufre hipotiroidismo.
Si regularmente se produce T3 reversa de forma excesiva, agregar más T4 simplemente va a exagerar el desequilibrio.
En lugar de mejorar, va a empeorar la condición del paciente!
Transporte deficiente
Para tener efecto sobre la salud, las hormonas tiroideas debe ser capaces de llegar a los numerosos tejidos y células del cuerpo.
El transporte de hormonas tiroideas puede ser inhibido por una variedad de condiciones comunes, entre ellas:
- Resistencia a la insulina.
- Diabetes.
- Depresión.
- Trastorno bipolar.
- Hiperlipidemia (colesterol y triglicéridos altos).
- Síndrome de fatiga crónica.
- Fibromialgia.
- Enfermedades neurodegenerativas.
- Migrañas.
- Estrés.
- Ansiedad.
- Cuánto tiempo lleva enfermedo.
Pero, a su vez, la función tiroidea deficiente aumenta el riesgo de desarrollar estas condiciones.
Lo que significa que es posible caer en un círculo vicioso de la función tiroidea reducida y distintos problemas de salud.
Coartar el transporte de hormona es otro factor que contribuye de la disfunción tiroidea que no es ayudada al agregar más T4.
Tratar una condición de la tiroides únicamente con T4 es como cargar un tren con comida para ayudar a resolver el hambre en el otro lado del país y luego dejar que no se mueva de la estación.
Trastornos autoinmunitarios
Un porcentaje de enfermedad de la tiroides es causado por trastornos autoinmunitarios.
Los dos principales culpables son la tiroiditis de Hashimoto y enfermedad de Graves.
Estas condiciones dañan la tiroides y son excepcionalmente difíciles de diagnosticar mediante métodos estándar.
Si el paciente sufre una enfermedad autoinmune, y al mismo tiempo recibe tratamiento para una condición de la tiroides, puede continuar experimentando síntomas como:
- Dolores musculares.
- Fatiga.
- Resequedad en los ojos.
- Pérdida de pelo.
Síntomas que normalmente se atribuyen a problemas de la tiroides.
Lo que puede causar la sensación que sus medicamentos no ayudan a resolver su problema de tiroides.
Si el paciente padece una enfermedad autoinmune, solamente levotiroxina no podrá resolver los síntomas.
Un enfoque de múltiples sistema de optimización y tratamiento sistemático debe utilizarse para devolver el cuerpo a la normalidad.
¿Cuál es la mejor prueba?
El control mediante la prueba estándar de TSH y el tratamiento de condiciones de la tiroides exclusivamente con T4, está claro que no funcionan.
Los expertos sugieren que tan solo en los EE.UU. Entre un 10 a 40 por ciento de la población experimenta problemas de tiroides.
Peor aun, están sin tratar y carecen de diagnostico.
Existen muchas variables y factores únicos involucrados en el funcionamiento de la tiroides en cada persona.
Cuando se entiende eso, se comprende que sea importante realizar pruebas y tratamientos adecuados.
Para tener una mejor comprensión de la salud de la tiroides, se deben comprobar las siguientes hormonas:
- T3 libre.
- T4 libre.
- T3 reversa.
- Globulina transportadora de hormonas sexuales (SHGB).
- Leptina.
- Tasa metabólica basal.
Solo entonces el médico puede prescribir el método apropiado de medicación y la dosis adecuada de levotiroxina para cada caso personal.
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La forma de tomar la levotiroxina también juega un papel clave en los síntomas.